1. **Desigualdad Competitiva:** Las nuevas disposiciones crean un entorno de competencia desigual al permitir que las plataformas digitales operen bajo regulaciones menos estrictas que las impuestas a los transportistas tradicionales, lo cual va en detrimento de miles de empresas que han cumplido rigurosamente con los estándares y obligaciones que la ley nos ha exigido durante años. 2. **Requisitos Administrativos Diferenciados:** Mientras que los transportistas tradicionales debemos cumplir con múltiples trámites, permisos y renovaciones, a las plataformas digitales se les otorga una facilidad administrativa que favorece su operación sin las mismas responsabilidades, creando así un desequilibro en la competencia. 3. **Impacto Económico:** La implementación de este decreto no considera los efectos económicos negativos que tendrá en los transportistas tradicionales, quienes hemos invertido en cumplir con las normativas vigentes y mantener un estándar de servicio seguro y de calidad. Esta medida puede resultar en pérdidas económicas significativas para nuestro sector, afectando a de familias que dependen de esta actividad. 4. **Seguridad y Capacitación:** Las nuevas disposiciones eximen a los conductores de plataformas digitales de contar con licencia federal, lo cual pone en riesgo la seguridad de los pasajeros al no garantizar la capacitación y experiencia que se exige a los operadores tradicionales. 5. **Vigencia y renovación de permisos:** La falta de claridad en el proceso de renovación de la Tarjeta de Identificación Vehicular (TIV) genera incertidumbre en la operación de los vehículos bajo las plataformas digitales, lo que podría derivar en conflictos legales y operativos que no afectan de la misma manera a los transportistas tradicionales.